Una Approximación a la Mujer Alemana

Entre las mujeres españolas, la mujer alemana suscita mucha polémica. Antes de entrar dentro de la sociedad alemana, la mujer española ve a la mujer alemana quizás con admiración, debido a las bajas de maternidad interminables y las ayudas del estado, o quizás porque tienen una cancillera en la cabeza del estado alemán. Cuando una mujer española o para no generalizar, latinoamericana, francesa, inglesa, o de otro país dónde la mujer tiene poder visible dentro de la sociedad, entra en profundidad en Alemania, el choque sociocultural se hace evidente. Antes de continuar con mi approximación me gustaría mostraros cómo los periódicos de diferentes países tratan el tema de la mujer en el día en que se celebran los 100 años del “Día de la Mujer Trabajadora” en España, o simplemente el “Día de la Mujer” en el resto del mundo.

  • ES: ElPais.com, Hola.com, abc.es:

http://www.elpais.com/global/

http://www.hola.com/actualidad/2011030751460/dia/mujer/trabajadora/1/

http://www.abc.es/20110308/sociedad/abcp-brecha-salarial-dispara-cuando-20110308.html

  • EN: TheGuardian.co.uk, washingtonpost.com:

http://www.guardian.co.uk/world/series/top-100-women

http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2011/03/08/AR2011030800005.html

  • FR: lemonde.fr, libération.fr:

http://www.lemonde.fr/idees/article/2011/03/07/entreprise-administration-ou-sont-les-femmes_1489443_3232.html#ens_id=1488706

http://programmes-tv.blog.lemonde.fr/2011/03/07/france-2-ose-la-tele-realite/

http://www.liberation.fr/societe/01012324232-pourquoi-ne-pas-inciter-les-hommes-a-occuper-des-emplois-dits-feminins

  • DE: Die Zeit, Süddeutsche Zeitung, Taz:

http://www.zeit.de/sport/2011-03/fitschen-dfb-frauen-quote-frauentag

http://www.zeit.de/kultur/2011-03/internationaler-frauentag-100

http://www.sueddeutsche.de/digital/frauen-in-der-informatik-deutschland-ist-rueckstaendig-1.1069011

http://taz.de/1/leben/alltag/artikel/1/100-jahre-100-wuensche/

En cómo tratan el día de la mujer en los periódicos se ve claramente qué país está por la labor de la igualdad de derechos entre el sexo femenino y masculino en nuestra sociedad, y qué país no. También en qué punto están en la lucha neo-feminista.

Antes de la primera y de la segunda guerra mundial, la mujer alemana tenía el mismo perfil en la sociedad que la mujer española, francesa, inglesa, de ahí que hace cien años surgiera el movimiento feminista, la lucha de Clara Campoamor, de Simone de Beauvoir es seguido por Hillary Clinton, Christine Lagarde, por Carmen Alborch, por Soraya Sáenz de Santamaría, por Carme Chacón y por mi mísma desde mi humilde posición de mujer habitante en este mundo. Personalmente entiendo que los derechos de nosotras mismas, los tenemos que conseguir nosotras mismas y lo que nosotras consigamos es una puerta más abierta para las futuras generaciones tanto de hombres como de mujeres. Gracias al avanze en las nuevas tecnologías la mujer árabe se está haciendo notar y puede luchar más fácilmente contra las injusticias de su sociedad, haciendose escuchar y respectar. A todas las mujeres árabes anónimas les queda mucho camino por recorrer, pero lo importante es que luchan por sí mísmas, por su futuro y sabiendo lo que quieren.

Alemania fue dividida en dos partes después de la segunda guerra mundial, y cada parte fue gobernada por sistemas políticos completamente opuestos, el comunismo en la parte este, y el capitalismo en la parte oeste. Desde el punto de vista de la mujer, el sistema comunista la hacía trabajar, los niños iban a la guardería, y la mujer era considerada como una más, un agente productivo más, era una mujer productiva y trabajadora aunque fuera madre. Por el contrario en la parte capitalista se impuso el modelo que la mujer tenía antes de la primera guerra mundial, eso significa, mujer dedicada a la casa, al cuidado de los hijos y si trabajaba antes de casarse era en oficios llamados para la mujer. España tiene su historia, Francia tiene su historia, Reino Unido tiene su historia y en cada país se ha visto una evolución diferente de los derechos de la mujer, en nuestro país vinieron todos de golpe a la muerte de Franco, en Francia ya los empezaban a tener en los años sesenta cómo pasó en el Reino Unido, pero en Alemania, aunque protocolariamente, por ley no se pueda discrimizar por sexo, raza, religión y se “apoye” a la mujer con muchas palabras escondidas, lo cierto es que tal avanze es inexistente.

Me gustaría crear un poco de polémica (espero muchos comentarios), así que voy a escribir de una manera radical protocolariamente aceptable. El gobierno alemán penaliza a la mujer trabajadora alemana desde el punto de vista:

  • Bajas maternales de entre 1-3 años = Ruptura de la carrera profesional por cada nacimiento de un hijo. LEY: Tanto hombres como mujeres pueden coger las bajas maternales/paternales. No es legal que te despidan, pero pueden hacer mobbing o despedirte por otra razón. REALIDAD: Muchas mujeres no vuelven a sus puestos de trabajo después de la baja de maternidad. CIERTO: Hay asociaciones de mujeres que te ayudan a la reinserción al mundo laboral. REALIDAD: Los jefes no quieren a madres en los puestos de trabajo, porque una madre se tiene que dedicar a sus hijos.
  • No hay casi guarderías de 0-3 años, el sistema público de escolaridad empieza a los 6 años, antes se entiende que los niños tienen que ser educados por la madre. Y a partir de los 6 años hasta los 10, los niños tienen horarios de colegio que empiezan a las 8h hasta las 13h en el mejor de los casos, a veces salen a las 11h. REALIDAD: Qué pasa con los niños? Quién los cuida? Quién los educa? Pues, evidentemente la madre que está en casa y puede compaginar sus quehaceres con el cuidado de los niños.
  • Cuando una mujer se casa, y su sueldo es inferior al del marido se pueden cambiar el porcentaje de impuestos que se pagan al estado para que en el cómputo general, la familia pague menos impuestos y tenga más beneficios netos reales. Eso significa que según la diferencia entre los sueldos se puede llegar a pagar una mujer como máximo un 60% de impuestos y el marido un 20% (en el peor de los casos, porque también en el cálculo puede salir que la mujer pague un 50% y el hombre un 30%). REALIDAD: La psicología social canta por los cuatro costados, sueldo bajo que recibe la mujer, paga más impuestos, su sueldo y valor por su trabajo es tremendamente degradado y si encima tiene que pagar una guardería para sus hijos hasta los séis años, que por cada hijo vamos a poner una media de 500€ al mes, pues… las cuentas no salen.
  • El llamado LUJO por no hacer nada. Después de leer los primeros tres puntos, también se puede sacar en claro, la discriminación de la mujer por escalas sociales. Quién puede pagarse las guarderías, las extra canguros, los colegios privados con comedor al mediodía, quien la diferencia entre sueldos entre marido y mujer no está agudizada, etc. Hay diferentes puntos de vista de los derechos de la mujer en la sociedad, dependiendo del estatus social y de si se és madre o no. Aquí se ve cómo lo máximo, que la mujer esté en casa, el marido puede mantener una familia entera, la mujer no tiene necesidad de trabajar. Ni siquiera se computan como paro, porque es que no quieren trabajar.
  • A la mujer trabajadora y madre se la llama “Rave-Mutter”, que significa madre cuervo o a la mejor traducción mala madre. Porque no se está encargando de su objetivo como mujer que es cuidar de los niños y de la casa. Pero de esta expresión sale que por ejemplo, en el trabajo, una mujer embarazada es desplazada, porque parece ser que pierde la competencia, la sabiduría, olvida sus estudios. En algunos casos, la despiden después de la baja de maternidad, no les renuevan los contratos, les bajan el sueldo con la excusa de que no son flexibles… Y no sólo a las madres, sino también a las “potenciales madres” en edad de procrear.
  • Mujeres que pierden el poder de la palabra y de la acción debido a que no tienen poder adquisitivo independiente al del marido. Piden permiso para comprarse ropa, piden permiso para la toma de las decisiones de la casa, tienen que comprar en las tiendas de segunda mano la ropa para ellas y para los hijos, mientras el marido compra ropa en las tiendas normales. Por suerte o por desgracia aquí conozco a mucha gente, y he visto mujeres “encarceladas” a su marido, porqué sino, ellas no tienen nada, y he visto también matrimonios por contrato de “tener hijos y mantener a la mujer”. En este ambiente frío, los hijos son educados, modelo de madre sumisa y comprensiva y padre autoritario y distante.

Está claro que en todos los países cuecen habas y Alemania no es una excepción. El problema de este país, es que las mujeres no luchan por sus derechos, no quieren cambiar su estatus, ellas están convencidas de que este modelo de mujer en casa y cuidando hijos es el mejor para la sociedad y para ellas mismas. Un día en la consulta del médico, cayó en mis manos la revista Cosmopolitan, y leí un artículo en el que decía que hacer para convencer a mi jefe que aunque sea madre puedo hacer bien mi trabajo. Pensé, madremia! Cómo está el patio. El otro artículo hablaba de cómo seducir a tu compañero de trabajo para que te haga caso. En eso dije, o la revista está enferma, o a la mujer aquí le pasa algo y no sabe todavía qué exactamente.

No me estoy inventando nada, y creo que en España la situación de la mujer es bien diferente y sobretodo es diferente en nuestra cabeza, en nuestro modus vivendi aunque haya de todo en todas partes. Lo importante es que conociendo nuestras cartas, tomemos nuestra decisión a sabiendas de lo que hacemos, y nosotras mismas, desde nuestro corazón. Personalmente, yo tengo treinta años, quiero tener una muy buena carrera profesional y tener hijos, mi punto de vista es que un hijo es cosa de dos, la mujer pone el óvulo, el hombre el espermatozoide y si se quiere mantener dos carreras profesionales y criar una prole hay que hacer esfuerzos y sacrificios por ambos lados. Lo que no voy a aceptar por ejemplo es que mi suegra alemana de cincuenta años me diga que soy una “Ama de casa” “Frauhaus”, o que me diga que si trabajo es temporalmente, o que si cuando digo que mi sueño es tener una habitación para mi para pintar, mi cuñada alemana de veintidós años diga que tenga que forzar a mi pareja a hacer carrera para tener una gran casa. No, hay cosas que no voy a aceptar, por dignidad, y que las replicaré por dignidad del resto de mujeres qué quieren vivir su vida con exactamente las mismas oportunidades que cualquier otra persona en la sociedad en la que vivo. Qué por el hecho de ser del sexo femenino no somos inferiores, ni tenemos que ser mantenidas, ni tenemos que ser todas enfermeras (respetando la profesión), tenemos derecho a respirar y a elegir. Tenemos derecho a ser nosotras mísmas.

 

Bettina Wulff y la Liberación de la Mujer del Siglo XXI

Después de varios artículos ultra sensacionalistas que el Süddeutsche Zeitung ha publicado, me he pasado al Die Zeit, mucho más objetivo e intelectual. Y sorpresa sorpresa, me he encontrado con este artículo de opinión en la última revista del periódico que salió a la luz el viernes pasado.

http://www.zeit.de/2011/08/Gesellschaftskritik-Pferdeschwanz

Ella es la mujer del Presidente de Alemania, nuestra modernísma First Lady Bettina Wulff, tatuajes, modus vivendi de mujer independiente de nuestros días, con hijos, pero no por ello, embasada al vacío de la perdición humana, y con mucho carisma. En el artículo se critica su cola de caballo, porque según el cronista, no es protocolaria ni de recibo. Verdad, quizás no sea protocolaria para recibir a los invitados estatuales al estado alemán, pero me fastidia leerlo, porque estos protocolos se extienden también al mundo de las empresas. Y este peinado es uno de los más severamente criticados en los despachos, llamándolo incluso despectivamente, el peinado sin peinar de estar por casa. Desde aquí voy a empezar a llamar a la cola de caballo, que deja la cara despejada y muestra un matiz moderno a la vestimenta ya restrigida del protocolo, el corsé del siglo veintiuno. Si Coco Chanel nos liberó del corsé en el siglo veinte con sus diseños en punto y ligeros, Bettina Wulff tiene que ser el ejemplo de la liberación del peinado en la mujer de la sociedad moderna-actual.

Me encanta cómo analizan la cola de caballo, si es alta, si es baja, si está en el medio, que si es con pelo largo, que si es con pelo corto. El lenguaje no-verbal de nuestro cabello es, fue y sigue siendo la carta de presentación de la profesionalidad de una mujer. Podemos estar de acuerdo o no, pero lo és, y una melena perfecta salida de una foto de una revista de 5 segundos, tiene que durar las 12h de una jornada laboral que cuenta desde que se sale de casa hasta que se entra. Perfectas, impolutas, la liberación todavía está por llegar. Pero esta foto, nos indica, que puede llegar, y esta crítica nos indica que la sociedad se va a resistir, pero por favor, desde aquí, desde Alemania, Bettina Wulff lo puede conseguir, tiene poder y puede revolucionar el encorsetamiento del protocolo, manteniéndolo pero dejándonos respirar.

 

Mujer Trabajadora, Si, pero si no es Madre

Hace 50 años la mujer casi no podía ni trabajar, estaba mal visto, y si lo hacía era, en trabajos como secretaria y con mucha suerte como profesora, aunque en las zonas rurales a parte de llevar la casa, también se encargaba de algunas tareas del campo o del cuidado de los animales. Y eso, aunque no era remunerado, era trabajo, y trabajaba para la economía familiar.

El movimiento activo feminista de los años cuarenta propulsó la idea de que la mujer podía acceder al mercado laboral y trabajar en cualquier trabajo. Antiguamente todos los trabajos eran de «hombres», así que la expresión «acceder al mundo laboral» significaba acceder a cualquier tipo de empleo.

Ahora según nos encontremos en países más o menos desarrollados feminísticamente hablando vemos diferentes evoluciones de este movimiento feminista. Personalmente, si hablamos de temas de mujer, el país más evolucionado es Francia, y quizás después me atrevería a decir España, y después los países escandinavos. En las últimas posiciones de esta tabla imaginaria pondría a Alemania, Estados Unidos y Reino Unido.

Mientras que en Francia se hablan de los problemas reales de la mujer abiertamente, como son la conciliación de la vida familiar y profesional, los problemas cotidianos de los hijos, cómo mantenerse femenina, cómo mantener la vida sexual activa siendo madre, casada, trabajando, y lo más importante cómo compartir con la pareja todas estas responsabilidades. Con estos puntos de vista, Francia está asumiendo un tipo de mujer «normal», o que al menos «debería-ser-normal-en-todos-los-países», un tipo de mujer que puede trabajar, que puede ser madre y trabajar, que puede ser femenina y tener cargos de responsabilidad, que puede ser femenina y ser madre, que puede ser amante y ser amada, ser madre y trabajar, en definitiva que puede decidir su estatus y situación en la sociedad abiertamente, sin ningún tipo de prejuicio. Cierto que siguen siendo la mayoría, las mujeres francesas madres que piden la reducción de jornada (los miércoles libres) para atender a sus hijos cuando no tienen escuela, pero este factor no las hace inválidas para trabajar y sus compañeros lo tienen en cuenta a la hora de planificar los proyectos, trabajos, etc.

En España estamos avanzados si, pero con un paso para atrás respecto a Francia, en el sentido, en que para tener éxito en el terreno profesional, o ser «mujeres de vanguardia» y/o modernas, todavía tenemos el prejuicio de que hay que «no-ser-madres», o «estar-solteras». Lo vi claramente estupefacta cuando en el mes de mayo leí en la portada y en un artículo de la revista InStyle de otro mes, creo que era marzo, en el que citaban «la mujer de hoy», y entre las páginas mostraban 5 mujeres «de hoy», todas ellas actrices, empresarias de éxito, de entre 30 y 35 años, solteras, y sin hijos. Es decir, esta es la imagen, que España, en este momento quiere ofrecer cómo mujer moderna. Aunque si es verdad que entre nosotras, en asociaciones de mujeres, en reportajes, sí se habla de cómo mejorar la conciliación de la vida profesional y personal, cómo ser madre y llevarlo todo, etc. Con ésto, estamos, los españoles, asumiendo que la mujer es libre, que puede decidir su papel en la sociedad, que puede trabajar y ser madre sin estar mal visto, y que en esta carrera de obstáculos, quizás pierda su feminidad. Pero la mujer española puede con todo! Y todo el mundo lo sabe!

En Alemania, que se encuentra entre los últimos de la tabla, es, desde mi punto de vista, uno de los peores países de cara al feminismo, con la promoción de un papel trogodita-dinosaurio de la mujer en la sociedad. Después de la segunda guerra mundial, hay dos Alemanias, que todavía hoy están muy diferenciadas, no sólo económicamente sino también en temas de mujer. Mientras que en el Este la mujer trabaja y hay una plaza de guardería por niño, en el Oeste no. Así que voy que hablar principalmente del Oeste, aunque las asociaciones, revistas, periódicos, impuestos, políticas sociales sean comunes. En Alemania (Oeste), la mujer se ve cómo una inválida cuando se convierte en madre, y en una semi-inválida cuando se casa. Es decir, que cuando cambia de estatus civil / madre de repente, cambia su libertad, cambia su forma de vestir, cambia su actitud de ella misma, pero también de la que las rodean. Deja de ser femenina, deja de trabajar, y pasa a depender íntegramente del marido (y con mucho gusto) y forzándo, al hombre, a tener éxito, para que entre más dinero en casa, y que la mujer pueda vivir mejor. La mujer acepta totalmente su papel, y el resto de la sociedad lo confirma, reprochando a las mujeres que no siguen este papel. Es decir, que Alemania aprueba que la mujer estudie, trabaje, pero sólo hasta un punto. En este punto, todo son ayudas para que deje su trabajo, cuide de los niños, y restricciones para que no se salga de este ideal de mujer-que-se-queda-en-casa y en el que pierde su identidad, libertad y feminidad. (quizás por eso no hay tanto paro ni problemas de pensiones en Alemania, porque la mujer no trabaja?).

Leyendo libros, escuchando la radio de otros países, me da la impresión de que en cierta manera se está forzando a la mujer media, a quedarse en casa en el momento en que se queda embarazada, sea para soportar la economía familiar/o del país, para soportar al marido, para educar y cuidar a los hijos, pero en definitiva fuerzan a la mujer a volver a su papel ancestral, a despojarla de su libertad de movimientos y de decisión, a despojarla de su feminidad cómo mujer, a sumirla en la ignorancia, en la sumisión al marido, en la sumisión a la familia y a que pierda su profesión y su estatus en la sociedad.

Cada país tiene su contrapunto, su forma de ver la organización del país, y hay que investigar bien antes de criticar nuestro propio país en temas de avances feministas, nos lo tenemos que creer, sómo muy modernos y estamos muy avanzados en temas de la mujer, pero hay que seguir avanzando y sobretodo exportando nuestro modelo, sin miedo, para liberar al resto de mujeres de esta «nueva-moderna-represión», es decir, que una mujer puede ser madre, trabajar, ser femenina, casarse y ser respectada como profesional, como madre, como mujer atractiva, como compañera y amiga.

Fuck-me Shoes

Los «fuck-me shoes» son aquellos zapatos de tacón alto que te quedan tan irresistiblemente bien, que está una tan sexy, que lo hombres no dudarían en seguirte hasta el fin del mundo si se lo pidieras en ese momento.

La frase dónde he sacado esta expresión, viene del libro que me estoy leyendo ahora «Notting Hell» de Rachel Johnson, cuando escribe: «There’s no point in wearing fuck-me shoes if you’re walking children to school – through lots of more high maintenance mothers do.» que significa «No voy a llevar ni de lejos, tacones altos ultra chic para llevar a los niños al cole, aunque otras madre de alto stading lo hagan».

Mi reflexión está dirigida a las madres que deciden voluntariamente quedarse en casa para cuidar a la prole. Sean de la clase social que sean, todas al fin y al cabo tienen los mismos problemas durante el día: organizar la casa, organizar su agenda de actividades, si tienen un trabajo extra pues hacerlo, cuidar que sus hijos lleguen al colegio puntualmente y a sus demás actividades extra-escolares, que hagan sus deberes y al final del día acostarlos y preparar la cena para el marido que llega del trabajo. Un trabajo que dura la friolera de las 24horas al día.

Luego están las otras madres que trabajan y que no se quedan en casa cuidando a la prole, pero que hacen la lista de tareas de las madres que se quedan en casa más su trabajo de mínimo 8 horas diárias.

Ya he oído varias veces, tanto aquí en Alemania como en Francia la retórica, de que: Por qué trabajar? Si nos mantienen, nosotras en casa sin hacer nada.

Después de años, y mucho tiempo de aburriemiento (la mayoría, no todas) exclaman como excusa que tienen miedo al cambio, a volver al trabajo, y que es complicado salir del círculo vicioso de estar en casa. Que es duro buscar trabajo cuando has estado muchos años sin responsabilidades profesionales, que los empresarios no quieren saber nada de madres o amas de casa.

Cierto, cierto, pero también tenemos que anunciar bien alto el «mea culpa» y las pocas ganas de luchar literalmente contra el sistema. Porque si en algo define la batalla del feminismo, es el contra-conformismo. Si por todas las mujeres que lucharon contra el estatus de la mujer en la sociedad, fue el luchar, el no ser conformistas, el levantarse por la mañana y ponerse a trabajar contra toda imposición cultural contra su libertad de expresión (sea trabajar, votar, tomar decisiones, decidir si tener hijos o no, etc, etc).

Esta semana pasada leí en la Vogue UK del mes de julio, una entrevista a la Madame Massanet, la mujer que ha levantado ella sola el imperio de las ventas de moda y productos de haute-couture en internet, llamado net-a-porter.com, y theoutnet.com. En ella, le preguntaron a la Madame Massanet por su éxito, y ella contestó: «Contratar a madres trabajadoras, porque ellas son multi tarea y extremadamente productivas». Ahí está la clave de que esta Madame super inteligente ha comprendido y que el resto de dinosaurios-hombres-de-negocios-empresarios no.

Otra de las cosas que me encantó de la entrevista, es que ella va vestida super elegante y con taconazos, y todos sus trabajadores/as también! Ésta es una de las batallas que nos quedan por ganar, y que ya se empieza a conquistar pequeñas parcelas, pero todavía no todas. Que una mujer ultra femenina, bien vestida, ultra fashion tenga responsabilidades y que le tengan respecto como buena profesional. Que no sólo las feas y mal vestidas tienen porqué tener éxito en los terrenos ejecutivos o en negocios que no tengan que ver con la moda.

Ahí está mi punto de «fuck-me shoes», las mujeres se auto desprecian por llevar zapatos de tacón alto, por ir sexys? En el momento que nos sentimos guapas nos sentimos también incapaces de ser profesionales? Despreciamos también a las mujeres que se sienten sexys? Las sentimos como amenazas sexuales respectos a otros hombres?

Sin entrar en temas biológicos y de nuestra naturaleza antropológica, el nuevo feminismo tiene que sobrepasar la barrera alta y bien puesta en nuestras cabezas femeninas de los prejuicios católicos, que nos impusieron durante el siglo pasado, en tiempos de la post-guerra española. Así que mujeres, liberaos, y con fuck-me shoes a comerse el mundo profesional, en el que tenemos muchas cosas que decir y hacer. O para ir a buscar a los niños al colegio, o ir a comprar el pan. Y cómo un día me dijo mi hermana-ultra-fashion: «Un día mi compañero de departamento, me dijo que tenía una presión super grande al trabajar conmigo al lado, porque no podía no cordinar bien los colores de la ropa, o no llevar limpios los zapatos o utilizar calcetines acordes con la vestimenta».

Las Mujeres Lideran la Copa del Mundo de la FIFA

Si, así es. En estos días en los que se está celebrando la Copa del Mundo de la FIFA, estamos viendo cómo las mujeres están tomando ventaja, poniéndose en primera fila para ver los partidos de fútbol. Sean españolas, alemanas, francesas, todas ellas, mujeres, sufren cómo el más hooligan de los hombres, gritan, se exitan, se maquillan con los colores de la bandera y se visten de cabeza a los pies con las ropas de la selección.

Todas ellas, las futboleras, vestidas para la batalla del fútbol, para conquistar esta plaza que antes era ocupada sólamente por hombres, léase noches de fútbol igual a noches de hombres, conversaciones de fútbol eran sólo conversaciones de hombres, saber las reglas del fútbol era una señal inequívoca de que eras un hombre, y quedar los jueves por la tarde con los colegas del trabajo o amigos para jugar al fútbol era una actividad sólo de hombres.

Ahora ellas, han demostrado poco a poco, que no sólo para los hombres es el fútbol (o de especímenes femeninos raros amantes del fútbol), ahora nos encontramos con comentaristas cómo Laura Martínez, Rebeca Revilla y María Bretones en la Cadena Ser y Sara Carbonero en Tele 5. Nos encontramos a mujeres más interesadas en jugar partidos de fútbol, de entrenarse, de saberse las reglas, de tener uno o dos equipos de fútbol favoritos, de estar encantadas y emocionadas al hablar del partido del fin de semana, de ir a ver los partidos de fútbol de la liga, de la copa, de la UEFA y ahora del mundial. Con las amigas y/o con los amigos, en definitiva ellas saben ahora cómo disfrutar de un buen partido.

¿Qué está pasando? ¿Esta es otra batalla de la igualdad que las mujeres quieren ganar, conquistar? ¿Demostrar fácilmente que pueden atajar con éxito áreas que hasta hace unos años eran sólo para los hombres?

Los nuevos estadios de fútbol, más cómodos, más caros, más tecnológicos, más confortables, más limpios, más seguros, más adecuados a la familia, a llamar a las mujeres al estadio cada domingo, con zonas comerciales, con hoteles, restaurantes, sales de conciertos e incluso algunos con zonas SPA, y Chill Out. Conjuntamente con los clubes de fútbol que gracias a sus sistemas de CRM, márketing personalizado han sabido conquistar el corazón de miles de mujeres atrayéndolas a más de un partido al mes. Los Clubes y los nuevos estadios (recomendados por la FIFA) son parcialmente responsables de esta ferbiente oleada de mujeres histéricas y emocionadas que miran deleitadas los partidos de fútbol, y concretamente estos días los partidos de la copa del mundo. La organización de la FIFA liderada y manejada completamente por hombres, está pensando en las mujeres? ¿En hacer interesante el fútbol para las mujeres? ¿Por qué este cambio? ¿Por dinero? ¿Por imagen?

Yo me pregunto si, estamos en la etapa de la euforia, y todas estas mujeres les guste o no el fútbol, son unas guerreras  a la conquista feminina de la sociedad de la igualdad que estamos creando, o si son de verdaderas fanes fanática-emocionalmente ligadas a la fiebre del fútbol. El tiempo nos dará la razón, aunque se augura un largo periodo de batalla, ya que este fenómeno no ha hecho más que empezar.

Marido de… // Esposa de…

Hace unas semanas leyendo una revista francesa vi que en nuestros países vecinos, dónde la mujer pierde su identidad al casarse, y dónde se escribe claramente en el carné de identidad. Están debatiendo el hecho de que quizás es posible indicar en el DNI con quién se está casado, independientemente de si se és hombre o mujer.

El país del que hablamos es Francia, y actualmente en el carnet de identidad de la mujer, su «identidad» se refleja como sigue:

Nombre: Carla

Apellido: Bruni

Esposa de: Sarkozy

Pero aunque en el carnet de identidad, se mantenga su apellido de soltera como apellido de la mujer, no ocurre lo mismo en el resto de papeles oficiales (al menos es mejor solución que en Alemania, dónde desaparece completamente la identidad de la mujer cuando se casa).

El debate es que ahora, el hombre puede también pedir que se incluya en su carnet de identidad, de quién es esposo, o marido. Y por ejemplo, en el DNI se vería reflejado así:

Nombre: Nicolas

Apellido: Sarkozy

Marido de: Bruni

Me parece una solución fácil y rápida al problema de la egalidad en términos identitarios entre hombres y mujeres, pero permitírme decir, que mientras en el resto de papeles oficiales siga imperando el apellido del marido en la identidad de la mujer, esta medida sólo servirá para acallar algunas lenguas y abanderar la parte de «égalité» de la República, pero nada más.

Aunque hay que reconocer, que algunas asociaciones feministas o femeninas de Francia ya están levantando la voz y reconociendo que existe un problema grave a solucionar, el problema de la identidad de la mujer en Europa.

Sexo en Nueva York 2 // Sex and the City 2

Tuve la suerte de ver la película hace una semana en versión original, y el cine estaba a rebosar, vendían con la entrada si querias una botella de champán con copas, y todas las mujeres iban a ver la película vestidas con sus mejores galas-modernas y con taconazos. Un efecto sorprendente y que sólo por eso vale la pena un estreno de este tipo.

Al fin terminó la serie, después de ocho temporadas si contamos las dos útimas películas (para mi, cada película ha sido una temporada). Y durante este tiempo hemos visto la historia de una larga amistad entre cuatro mujeres que van madurando muy poco a poco, que tienen mil problemas como las mujeres de hoy, pero con un estatus bien alto, en una de las ciudades más caras y lujosas del mundo. Pero ahí están, para que nos identifiquemos, aunque al final de las temporadas iban más tendiendo hacia el negocio de la moda y el lujo (a lo que las mujeres tienen tendencia a soñar, y nos gustaría aspirar todas) en lugar de describir más las penas y desgracias de la mujer en la sociedad y su interacción en ella misma. Pero para qué darnos momentos tristes si nos pueden quitar y aliviar de las penas de la cotidianidad con un sólo capítulo? Además, según que temas tratan su punto de vista es muy interesante, porque hasta esta serie nadie hablaba con toda claridad del sexo, y de las relaciones sexuales desde un punto de vista femenino. Y por este punto, merece la pena el culto a la serie. Una serie escrita por y para mujeres, sin tapujos (no como mujeres desesperadas, escrita por un hombre conservador de estados unidos, que utiliza desesperadamente todos los clichés masculinos para hacer reir.. da pena.) una serie, que despertó el interés de todo el mundo, y que ha hecho que también el ir a la moda, el sentirse sexy, el sentirse guapa, bien consigo misma, no sea una razón para sentirse culpable o para sentirse menos inteligente.

Esta última parte de la historia, es decir, la segunda película, es la continuación de cómo van sus vidas después de los largos años de adolescendia (de los 30 a los 40) en una gran ciudad y con mucho dinero. Qué pasa cuando las protagonistas se dan cuenta, de que la vida no es tener «no preocupaciones», que pasa cuando «hay responsabilidades», y que vivir y amar a una persona durante mucho tiempo, no es fácil, no es un cuento de hadas, y que las relaciones entre un hombre y una mujer no es «conquistarlos» sino convivir durate muchos años, y vivir aventuras, vivir experiencias, y que el carpe diem no pasa por salir cada noche de fiesta, sino disfrutar de cada momento. Que no es necesario tomar un cosmopolitan para ser feliz, que no hace falta comprarse zapatos cada semana, ni dormir en camas nuevas cada noche, ni obsesionarse con cada mínimo detalle insignificante porque no hay otros problemas, porque lo que ellas tampoco resuelven en la serie después de doce años, es que hay que madurar, y en la madurez los problemas se ven de otra manera, aunque.. no será que en lugar de ir de la adolescencia a la madurez hay que ir de la adolescencia a la juventud? Dónde se era responsable, pero sin preocuparse, dónde la felicidad era perpetua, y dónde simplemente se vivía.

Por mi parte, me encantaría ver un Sexo en Nueva York 3 pero cuando nuestras protagonistas tengan 60 y 70 años (que ya se acercan!), y ver realmente como lo describen en la serie, y cómo resuelven la pareja complicada de Carrie y Mr. Big, y Samantha, y la familia ideal de Charlotte, y la desgraciada Miranda (necesita un psicólogo ya!! y nadie se lo dice).

Críticas sobre la película:

Es escandaloso que la mitad de la película sea un anuncio total a los complejos VVIP / VIP de Abu Dhabi. Igual necesitaban recursos económicos para financiar la película, pero me ha parecido demasiado fuerte utilizar más de la mitad del tiempo en la publicidad, al igual que el libro contra la menopausia, que publicitan al principio y al final también escandalosamente. Creo que hacer publicidad de una forma tan obvia en una película de este estilo, le quita clase, y le quita personalidad. En este punto, la película ha sido una decepción.

El segundo punto, no se si alguien sigue a veces los foros geeks de internet, decían que Carrie en esta película, utilizaba un ordenador portátil HP con Windows 7 en lugar de su clásico Macbook. Cosa que no es cierta. Carrie continúa escribiendo sus memorias y sus crónicas en el mítico Macbook que siempre ha utilizado a lo largo de la Serie y de la primera película.

La Mujer que depende del Hombre

Esto es lo que ocurre ahora mismo, en el mundo.

Aunque hayamos empezado el movimiento feminista – de igualdad hace 40 años, las mujeres que lo proclamaban y deseaban no tenían muchas veces medios para subsistir sin un hombre. La realidad, la cruda realidad es ésta. Y porqué lo digo? Porque al final de la trayectoria profesional viene la jubilación, más tarde o más temprano, todos vamos a terminar jubilados, y ahí es cuando vienen las grandes desigualdades. La mujer que ha trabajado en pequeños trabajos para «ayudar» a la economía familiar, o que ha dejado de trabajar para parir y cuidar a los hijos, o que ha trabajado con jornadas parciales para llevar las tareas de la casa, va a recibir una prestación de jubilación (pensión) suficiente para subsistir hasta el fin de sus días? No.. va a ser muy distinta a la del marido, y por muy feminista que sea la mujer, en este mundo completamente capitalista, quien no tiene dinero, o es muy listo sobreviviendo en la jungla o no puede comer o al menos vivir dignamente.

Y esa libertad de la mujer es muy cara, porque al depender económicamente del marido, no tiene independencia sexual que digo yo, es decir, la toma de decisiones, el dinero que se puede gastar cada semana, todo depende de qué opine quien trae el dinero en casa. Y se puede enlazar claramente con el maltrato en el seno familiar, el punto de poder que tiene el hombre sobre la mujer es terriblemente alto, y para la mujer dejar el seno familiar supone el coste de «supervivencia» del día a día y de tener algo para comer.

Hay mujeres (no todas) que se casaron por pura superviviencia dentro de la sociedad, por eso, aquello de buscar el príncipe azul no es broma, es la ley-de-vida-pura-y-dura. Si no se tenía marido, duro que sea oirlo, era difícil vivir y tener un porvenir. Pero la vida no es de color de rosa, y si el príncipe azul se vuelve azul oscuro casi negro, lo que pasa es que hay que aguantar a una persona por tener un estatus medio social, y por tener que comer (en el sentido metafórico). Luego cuando parten los hijos de casa, quedan las dos personas del contrato matrimonial cara a cara, sin amor, unidos por un mero contrato de supervivencia, en el que queda la última parte del contrato, vivir hasta la muerte de una forma digna.

Este es el precio para la mujer media que tiene que pagar para sobrevivir en una sociedad. Y esto es lo que hay que cambiar, hay que cambiar que la mujer no dependa de un marido, ni por un apellido, ni para tener para comer cada día, ni para sobrevivir en la sociedad. Que si la mujer decide compartir la vida con otra persona, lo haga de una forma libre y no obligada por la ley del más fuerte en la jungla. Que la mujer pueda recibir exactamente la misma prestación de la jubilación que su marido, en el caso en que ella no haya computado, o que se repartan a partes iguales, la suma de las dos cotizaciones,  aunque se divorcien o separen. La otra solución es que el estado cotize la seguridad social y las pensiones de aquellas mujeres que están de baja de maternidad o en trabajos de jornadas parciales o que están en casa sin trabajar, para así, al menos, tener una pensión de jubilación digna y no la mínima.

La Penalización de la Mujer Trabajadora en Alemania

El estado del bienestar en Alemania tiene una fuerte base en lo que el estado cree que es el núcleo familial ideal y perfecto. Este ideal consiste en un padre, una madre y sus hijos. Es decir un padre que trabaja, y una madre que está en casa cuidando a la prole. Y este ideal de familia lo sostienen a base de duras presiones de los impuestos, a base de ayudas y a base de doctrina política. Una situación a denunciar, porque atenta totalmente con el ideal de mujer trabajadora y porque va en contra de la conciliación de trabajo y familia.

Primero en Alemania la cantidad de impuestos que se paga depende del estatus civil, hay diferentes categorías, por ejemplo una persona soltera va a estar en la categoría 1, y va a pagar más o menos un 40% del sueldo en impuestos. Cuando una persona se casa con otra, puede mantenerse en la categoría 1, o cambiar a otra categoría. Este cambio significa que tienes la oportunidad de que una de las dos partes de la pareja pague menos impuestos, es decir un 20%, pero la otra tiene que pagar más, es decir un 60% para así siempre mantener un total de 80% de impuestos aproximadamente en un núcleo de 2 personas. La ventaja es que si una parte de la pareja gana más dinero, pagando menos impuestos habrá más dinero dentro del núcleo familial. La realidad es que normalmente siempre es el marido el que gana más que la mujer, y eso quiere decir que si la mujer trabaja, ella, cada mes va a recibir un sueldo irrisorio por su trabajo. Y si se mantiene la tasa de impuestos al 40%, está claro que se está perdiendo dinero. Y aquí está una de las trampas.

Por otro lado, si en esta situación la mujer deja de trabajar y se queda en casa cuidando a los hijos o de la casa, en este caso el estado alemán le dará una ayuda (la cantidad de la ayuda depende en cada región de Alemania) por el hecho de quedarse en casa. Vamos a suponer que una mujer madre que decide quedarse en casa, quiera hacer un curso de Inglés, y necesite una guardería para sus hijos por las mañanas. El problema vendría, porque el estado alemán no le permitiría buscar una guardería porque ella no tiene un trabajo remunerado que le ocupa el tiempo. Es decir, para acceder a una guardería (aunque sólo sea media jornada) se tiene que demostrar que se está trabajando, porque sino el trabajo de dicha mujer-madre es de cuidar a los hijos y de no hacer nada más.

El otro problema viene cuando no hay suficientes guarderías en Alemania, y no me refiero al caso español.. comparándolo se podría decir que en España tenemos muchas! En Alemania el caso es muy grave, y el estado no da facilidades ni para promover cursos de personal de jardín de infancia, ni para promover la construcción de guarderías. Son iniciativas de padres, de comunidades, de empresas o de coperativas las que se encargan de las mayor parte de las guarderías existentes. A veces son los padres mísmos los que tienen que hacerse cargo de las guarderías, de su gestión, de la limpieza y de las bajas por enfermedad de las trabajadoras.

El siguiente problema son las escuelas públicas y sus horarios. En España tenemos «parbulitos» o la Educación Infantil que va desde los 2-3 años hasta los 6 años, y los horarios, con cierta variación, van desde las 9h hasta las 13h y desde las 15h hasta las 17h. Con comedores y actividades extraescolares. En Alemania la escuela pública empieza a los 6 años hasta los 10 años, con un horarios de 8h hasta las 13h. Es decir, cuando hablamos de guarderías en España nos estamos refiriendo al periodo de 3-6 meses hasta los 2-3 años. En Alemania nos referimos a que es casi imposible tener guarderías llamadas «Kindergarten» que van desde los 3 años hasta los 6 años, y ya imposible es encontrar guarderías llamadas «Kinderkrippe» que van desde el 1 año hasta los 3 años. Y este problema continúa porque en la escuela pública hasta los 10 años no hay comedores escolares, y los niños terminan su jornada a las 13h! Qué haces con los niños todo el mediodía y toda la tarde? Algunos ayuntamientos ofrecen un servicio público de canguros, o de mujeres que cuidan a niños, pero es difícil también de conseguir a una de estas «mujeres».

Como se puede apreciar, el sistema está pensado para que sea la madre y no el padre, el que se quede en casa cuidando a los hijos. Primero ofreciendo una baja de maternidad de 1 hasta 3 años, para favorecer el no-uso de las Kinderkrippe, dónde la madre recibe dinero del estado (60% el primer año, si sólo se pide uno, o un 30% los dos primeros años si se piden 2 ó 3). Ahora es cierto, la ley cambió y el padre también puede coger este periodo de baja paternal, desde el segundo mes de baja de la madre (pero no a la vez). Pero pocos padres se cogen un año de baja paternal.

Otra de las leyes alemanas absurdas y que obligan al matrimonio como figura ideal de familia, es el hecho de que si no se está casado, los hijos sólo pertenecen a la madre y no al padre. Es decir, en caso de no estar casados, el padre tendría que adoptar legalmente al hijo para asegurarse algún derecho sobre «su propio hijo» y que su nombre apareciera en los libros de familia, etc.

El estado casi «obliga» a seguir este ideal familial a base de ayudas a quedarse en casa, impuestos abusivos, y no favoreciendo la creación de guarderías públicas, ni cambiando los horarios escolares. Pero la realidad es bien distinta, la realidad es que está ocurriendo toda una revolución en contra del sistema, cuyo resultado es una baja de natalidad esquelética 1,30 (España tiene 1,46), una tasa de matrimonios bajísima 4,48 (España tiene 4,23), matrimonios exprés por el nacimiento de un hijo y una edad de ser madre por primera vez, que está por encima de los 35 años.

¿Y si el Hombre se llamara como la Mujer?

Si, habéis leído bien el título del artículo… Una compañera mía de trabajo en Alemania, se va a casar el mes que viene. Aquí es tradicional que la mujer cambie su apellido por el del hombre en el momento de casarse, aunque ahora la ley dice que puede cambiarse el hombre también el apellido, o crear un nuevo apellido con el del hombre primero y seguido de un guíon el de la mujer. Aunque el 80% de las mujeres se lo cambian, y sólo el 5% mantienen su apellido de «soltera» (vamos, el suyo).

Pues bien, sorpresa sorpresa, mi amiga me dijo hace dos días, que ella no iba a cambiarse el apellido, y yo super feliz, porque ¿Por qué la mujer tiene que perder su identidad cuando se casa? Pero ella siguió hablando y dijo, pero mi compañero se va a poner el mío. Y yo ahí ya no supe que decir, porque ¿Por qué alegrarme? o ¿Por qué entristecerme? La dejé hablar. Y explicó que a su compañero no le gustaba su apellido y que se lo quería cambiar. Además, con el absurdo argumento que tienen los Alemanes, de tener siempre «un mismo nombre para toda la familia» (ella está embarazada), ya tenían dos argumentos para que el chico cambiara su apellido: Su apellido era feo e iban a ser una familia y entonces tienen que tener un sólo apellido identificativo para todos sus miembros.

Se podría considerar este caso como nuevo Feminismo, es decir que el hombre adquiera el apellido de la mujer cuando se casa. Y desde luego ésto, es toda una revolución, pero la idea es «la igualdad de derechos».  No vamos ahora a cambiar los papeles y a comportarnos como no nos había gustado que se comportaran con nosotras!

Yo estoy en contra de la pérdida de la identidad de la mujer, pero también de la del hombre. Aunque este tema no sea un punto crítico en España, sí lo es en el resto de Europa, y desde nuestro país hay que hacer peso para que nuestra manera de ver a la mujer se exporte al resto, para implantar una nueva forma de Feminismo y de Igualdad.

Nosotras como españolas, podemos mantener nuestra identidad cuando nos casamos en España o en otros países, véase el caso, ahora famoso, de Míriam González Durántez, casada con Nick Clegg, el ahora candidato a Primer Ministro en el Reino Unido, no ha cambiado su apellido y ni su marido tampoco. Y también nosotras como españolas podemos empezar el debate de la identidad de la mujer, para llegar a una mayor igualdad de derechos entre hombres y mujeres.